Estos dos hermanos reconocen que la excelencia se logra con una implicación permanente en todas y cada una de las etapas del proceso de producción, donde el conocimiento es clave para ir innovando y mejorando los productos.
Entrevistamos a los hermanos Bernardo y Jorge Hernández Tinoco para conocer las claves del éxito de la empresa BEHER, una de las empresas más representativa de Salamanca, con una notable historia, que de manera natural ya se encuentra en el tránsito de paso de la tercera a la cuarta generación.
– Empezamos la entrevista con Bernardo. BEHER es una empresa referente en Guijuelo con más de 90 años de historia,
¿cuál es el secreto para perdurar en el tiempo?
Ilusión, esfuerzo, compromiso y adaptación a los cambios.
Desde que nuestro abuelo Bernardo Hernández Blázquez empezara a vender los primeros productos curados en los años 30 las cosas han cambiado mucho, pero aún conservamos el espíritu familiar y la tradición heredada generación tras generación.
En estos momentos al frente de BEHER estamos mi hermano y yo, que somos la tercera generación, pues la cuarta ya desarrolla su labor dentro de la empresa.
Es precisamente esa evolución y crecimiento constante lo que nos ha impulsado siempre a seguir mejorando, innovando y a trabajar con tenacidad y sin descanso.
– ¿Qué destacarían como el valor más importante de su empresa?
Sin lugar a duda el capital humano. Tenemos productos excepcionales y únicos, cierto, pero que serian difíciles de conseguir si no fuera gracias al esfuerzo y tesón diario de nuestra gente. Y es que en nuestro sector hay que estar pendiente de hacer siempre el mejor producto, de estar a la última en formatos, envases, mercados, de llegar más lejos y a más clientes dentro y fuera de nuestras fronteras… y lograrlo solo es posible si te rodeas de los mejores. Nosotros tenemos la gran suerte de contar con una plantilla excepcional e implicada, con los mejores profesionales y con una extensa e importante red de distribución, siendo algunos de ellos compañeros de viaje desde hace varias décadas.
Presumimos con orgullo de nuestra «gente BEHER» pero sobre todo, de la confianza y el apoyo que cada día depositan en nosotros y en nuestros productos tanto clientes como proveedores.
– ¿Cómo se consigue ese capital humano tan importante que mencionas?
El capital humano se consigue con valores y formación. Debes empezar por formarte tu mismo y rodearte de profesionales más formados que tú, en las distintas áreas del negocio. En este aspecto nos ha ayudado mucho el Instituto Multidisciplinar de Empresa (IME), donde yo mismo he realizado el Programa de Desarrollo Directivo (PDD), que aunque siempre tengo poco tiempo, la formación personalizada del IME te permite compatibilizar la vida profesional y laboral. Además, hemos tenido bastantes empleados que han estudiado en IME Business School, iniciando su relación con BEHER con una beca, que luego se ha transformado en contrato, creo que es importante que haya una dualidad en la formación, esto es, que haya una coordinación entre el IME y la empresa.
– ¿Cómo se ha beneficiado BEHER por tu paso por la Escuela de Negocios de la Universidad de Salamanca?
En primer lugar, resaltaría el beneficio personal que obtenemos los que hemos tenido la oportunidad de participar en un programa del IME Business School, lo que supone un efecto no solo de formación, sino también de transformación. Pero de forma simultánea la empresa se beneficia, pues te ayuda a conseguir el capital humano que necesitas. Además, te ayuda a desarrollar tu capacidad de liderazgo, lo que facilita que te puedas rodear de los mejores profesionales en cada área del negocio. Sin duda, tú debes tener una idea clara de como gestionar la empresa y saber delegar todo lo posible a los profesionales. Pero hay dos cosas que no puedes delegar: la responsabilidad y el control, precisamente en este ámbito es donde más se beneficia la empresa del paso de cualquier profesional por una escuela de negocios.
– Terminamos la entrevista con Jorge, ¿Por qué habéis convertido la apuesta por el 100% ibérico en una de las señas de identidad de BEHER?
Porque para poder asegurar la máxima calidad de todos nuestros productos no podemos trabajar con otra materia prima que no sea excelente. Así, desde que nuestro padre, Bernardo Hernández García, se embarcara en la década de los 70 en la cría del cerdo 100% ibérico con el objetivo de controlar todo el proceso de producción y la homogeneidad de los productos, en BEHER siempre hemos apostado por la pureza racial, además de por la calidad de sus carnes, por un compromiso real con este animal autóctono y exclusivo de nuestro país.
– ¿Cómo se logra esa excelencia que os imponéis?
Con trabajo, compromiso, innovación… no hay más secreto que la pasión y la entrega a una cultura, la del ibérico, en la que hemos crecido, por la que vivimos y en la día a día trabajamos duro para lograr la satisfacción del consumidor. La excelencia se logra con una implicación permanente en todas y cada una de las etapas del proceso de producción, empezando por el cuidado al entorno donde crecen en libertad nuestros cerdos, garantizando su bienestar y las mejores condiciones higiénico-sanitarias y concluyendo con la elaboración artesanal de nuestros productos, donde compaginamos tradición con las últimas innovaciones tecnológicas. Y por último, autoexigencia.
Ser críticos e imponerse siempre más, no escatimar en ideas ni quedarse atrás, poner ilusión y ganas para avanzar al ritmo cambiante de los tiempos.
– Para conseguir la excelencia de la que hablas es importante rodearse de un buen equipo humano, ¿cómo habéis conseguido ese talento?
Por la propia dinámica de una empresa que lleva muchos años operando hay personas que tienes dentro de la empresa y que debes saber potenciar e incluso apoyarles con la formación que necesiten. Pero, por otra parte, para seguir avanzando e innovando necesitas atraer talento externo. En esta atracción y selección de talento, hemos contado con el IME, tanto para cubrir puestos claves con directivos con experiencia, como para ir desarrollando a jóvenes con becas vinculadas a la formación en IME Business School, para que se formen y puedan desarrollar funciones en la empresa. En ambos casos, es muy importante tener a alguien como el IME, que pueda facilitar los perfiles que hay en el mercado, pues te ayuda a aclararte en lo que necesitas y a tener puntos de comparación y a tener puntos de comparación para una de las decisiones tan difíciles como necesarias que es atracción y selección del talento para que el negocio siga avanzando.
– ¿Consideras que el IME puede ayudar a las empresas a abrir nuevas oportunidades de negocio?
Por supuesto que si, en ocasiones es una consecuencia directa de la atracción del talento que he comentado antes, en otras ocasiones es consecuencia de ideas tuyas y de tu equipo gracias a la formación. También en el proceso de formación se realizan actividades que suponen una gran ayuda para abrir nuevas posibilidades de negocio.
Otras veces por las jornadas de networking empresarial que desarrolla el IME para sus antiguos o para el público general.
Por último, mediante la participación en seminarios de Apoyo Empresarial IME como el titulado.
Oportunidad para la exportación de los productos de las empresas alimentarias de Castilla y León a Emiratos Árabes Unidos.
«Debes empezar por formarte tú mismo y rodearte de profesionales más formados que tú, en las distintas áreas del negocio».
«Hay que potenciar a las personas que tienes dentro de la empresa, incluso apoyarles con formación, y también para seguir avanzando e innovando necesitamos atraer talento externo».