“IME Business School hace compatible la actividad profesional y formativa, reduciendo la presencialidad necesaria, que se desarrolla durante los fines de semana.»
El apoyo del Instituto Multidisciplinar de Empresa (IME) es la pieza clave para conseguir que los másteres de la Escuela de Negocios de la Universidad de Salamanca, IME Business School, destaquen por su calidad. Como en los próximos días son las fechas en las que se realiza la matrícula para los diferentes másteres, entrevistamos a Chabela de la Torre, Directora de IME Business School para conocer más detalles sobre esta formación que prepara para el desarrollo de funciones en el mundo empresarial.
«En las aulas de IME Business School transformamos a las personas, enseñándoles a abordar los problemas y a tomar decisiones.»
«A través de los casos desarrollados con los directivos, tratamos de acercar al máximo la realidad empresarial al aula.»
«En los másteres para personas con mucha experiencia los casos se han adaptado a su nivel y su análisis se ve enriquecido por la interacción con sus compañeros.»
– ¿Qué se enseña en las aulas de IME Business School?
En las aulas de IME Business School no sólo se procura transmitir conocimientos, sino enseñar a abordar los problemas y a tomar decisiones. Nuestro objetivo es transformar a las personas, como indica nuestro eslogan “your talent transformation”. El objetivo es el crecimiento personal y profesional de las personas, lo que se consigue utilizando una metodología de formación, basada en el método del caso. Este método está presidido por los principios de rigor y relevancia. Por el primero, nos aseguramos que todas nuestras actividades formativas vayan encaminadas a conseguir el objetivo de la transformación de la persona. Mientras que por el segundo, todas las sesiones se centran en abordar todas las cuestiones se consideran relevantes en la gestión de una empresa.
– Es un concepto de enseñanza muy práctico, nos puedes explicar cómo se lleva a cabo.
En primer lugar, las sesiones son impartidas por directivos, a los cuales les formamos en la metodología del caso y les ayudamos a construir sus casos. Con ello, podemos plantear en las aulas casos reales de empresa, que presentan algún reto, dificultad u oportunidad. En los casos se presenta a las personas involucradas, entre los cuales, un/a directivo/a que tiene que tomar finalmente una decisión. Los casos se trabajan previamente de forma individual, para que el alumno reflexione, se ponga en el lugar del directivo y tome sus propias decisiones. Después, en grupos de trabajo, se discute el caso para percibir distintos puntos de vista. Por último, llegamos al aula, y se va desgranando el caso, detalladamente, con todos los aspectos que deberían haberse tenido en cuenta si hubieran vivido esa situación.
– ¿Qué tipo de casos trabajáis en las clases?
Se suele decir que los casos viajan mal, esto es, deben resultar familiares a las situaciones que se puedan encontrar los alumnos. Por ello, tratamos de acercar al máximo la realidad empresarial al aula. Como resultado, en IME Business School los alumnos encontrarán gran cantidad de casos de empresas cercanas a su entorno. Descubrirán el potencial de muchas de ellas, en las que se han tomado importantes decisiones de internacionalización, diversificación, nuevos modelos de negocio, etc. y de las que quizás tengan otra idea. También encontrarán grandes empresas conocidas por la mayoría de ellos. Se trata de trabajar casos de empresas en las que podrían empezar a trabajar en cualquier momento, que plasmen una realidad y les permita ponerse en situación.
– ¿Se consigue así realmente provocar que los alumnos hagan uso de sus competencias y habilidades directivas?
Se despierta gran interés en ellos por dos razones que caracterizan nuestras clases, que son los casos, como ya comentábamos, y los profesores. El profesorado está compuesto en un 90% por directivos de empresa, y el otro 10% por profesores de la Universidad expertos en la materia. Encontrar en el aula a la persona que ha estado involucrada realmente en el propio caso o en uno similar al que los alumnos están estudiando, aporta una base de relevancia a la formación y promueve que se genere un ambiente empresarial muy interesante para ambas partes.
– No obstante, no es lo mismo impartir esa formación para alumnos recién graduados que para profesionales con una dilatada experiencia. ¿No es así?
Así es, tenemos dos másteres para las personas con mucha experiencia: Executive MBA (EMBA) y el Executive Máster en Gestión de Empresas Agroalimentarias (EMA). Estos alumnos ya cuentan con un recorrido laboral considerable, ya han experimentado la realidad empresarial. No obstante, los casos están adaptados a dicho nivel de experiencia, tienen la oportunidad de conocer a directivos de éxito que imparten las clases. La esencia sigue estando en el proceso de transformación que se produce. Esto se complementa con el ambiente que se crea en el aula y la relación con compañeros que también son ya profesionales de amplia experiencia.
– ¿Cómo concuerda esta idea con el tipo de formación que impartis?
Todos nuestros programas han surgido de las necesidades que nos han mostrado la gran cantidad de empresas que se relacionan con el IME. Diseñando másteres enfocados a formar a los perfiles profesionales que demandan las empresas. MBA’s agroalimentarios para cubrir las necesidades que demandan las empresas predominantes de nuestro entorno. Másteres que se imparten totalmente en inglés, como el Global MBA, idóneos para preparar a profesionales para el Comercio Exterior. También podemos formar para cualquier área de la empresa, así como proporcionar una formación generalista en nuestro MBA.
– ¿Cómo hacéis compatible la actividad profesional con la formativa?
En IME Business School siempre hemos estado apoyando a las personas que son el centro del Proyecto IME. Con los cambios tan acelerados que hemos vivido en los últimos años la formación empresarial se ha convertido en un bien de primera necesidad. Para facilitar el acceso a la misma desde IME Business School se han tomado varias acciones, una de las cuales ha sido reducir la presencialidad necesaria en los procesos formativos, y desarrollándose en los fines de semana. Por ello, en el IME hemos intensificado el uso de la tecnología para minimizar el tiempo que el alumno debe estar en nuestras instalaciones para aprender con un programa de calidad.
– Chabela, sois Escuela de Negocios y tenéis vuestra propia dinámica de trabajo y enseñanza. ¿Cuál es, entonces, el vínculo con la Universidad de Salamanca?
El vínculo es total, pues todos nuestros títulos son de la Universidad de Salamanca. Tanto el IME, que es motor generador del conocimiento, como IME Business School, que ejecuta la formación que cada alumno necesita, son una parte de la Universidad de Salamanca. Ambos promueven el cambio en el mundo empresarial, labor que la propia universidad ha realizado durante más de 800 años. De hecho, nuestro éxito se debe a que hemos sido capaces de introducir una eficacia formativa al igual que las mejores escuelas de negocios, siendo un ente público, con precios ajustados al coste.