Javier Pérez de la Torre, Director General del Grupo Javier Sanz Viticultor SL
Entrevistamos a Javier Pérez de la Torre, Director General del Grupo Javier Sanz Viticultor SL, que nos cuenta su experiencia en IME Business School, la Escuela de Negocios de la Universidad de Salamanca.
¿Qué actividad desarrolla la empresa que dirige?
—Dirijo el grupo Javier Sanz Viticultor, compuesto por una bodega familiar ubicada en La Seca (D.O. Rueda), una empresa de distribución de fitosanitarios y otra de construcción. La bodega, núcleo del proyecto, está especializada en vinos de autor de alta calidad, elaborados con uva de viñedo propio y con un enfoque muy definido, recuperar variedades casi extintas y poner en valor el origen y la singularidad de nuestro viñedo. Es un orgullo formar parte de un proyecto con tanta identidad, donde se cuidan al detalle tanto el producto como la imagen, y donde el resultado, unos vinos realmente buenos, refuerza cada día el compromiso de todo el equipo. En su conjunto, operamos en sectores muy distintos, lo que exige una dirección estratégica sólida, visión transversal y una gran capacidad de adaptación.
¿Cómo ha sido su experiencia en el Executive de IME Business School?
—Muy positiva. Es un máster exigente, pero perfectamente compatible con una agenda profesional intensa gracias a su formato: viernes por la tarde y sábados por la mañana. Esa estructura me ha permitido aplicar lo aprendido de forma inmediata. Ciertamente es un programa completo y actualizado, donde se abordan todas las problemáticas que implican dirigir una empresa desde las finanzas y la estrategia, hasta la inteligencia artificial o el liderazgo. Se nota que el contenido está orientado a la realidad de las pymes.
¿En qué aspectos nota una mayor transformación después de haber cursado el Executive del IME?
—En la profesionalización de la gestión. El máster me ha ayudado a identificar áreas de mejora que no eran visibles desde dentro: desde el diseño organizativo hasta la gestión del talento o la planificación estratégica. También me ha reforzado en la importancia de contar con sistemas digitales (ERP, CRM) integrados, algo que ya habíamos empezado a implementar en la bodega, pero que ahora abordamos con mayor criterio. La introducción a la inteligencia artificial (IA), además, ha sido una de las sorpresas más relevantes. Es un cambio disruptivo que ya está transformando nuestros procesos. En este sentido, es muy positivo ver que la universidad se haya adaptado tan rápido. Gracias al Instituto Multidisciplinar de Empresa (IME), que cuenta con especialistas no sólo de todos los ámbitos de la gestión empresarial, sino que también informáticos, el máster ofrece una formación tan valiosa y actual como aplicar la IA en la empresa y en el trabajo del directivo. Para ello, ha sido crucial que los profe sores hayan sido directivos que están aplicando la IA en su empresa. Esta es otra de las grandes ventajas del máster: la gran variedad de directivos (unos 50) con los que puedes establecer un contacto directo y cercano durante
las clases.
¿Cómo ha sido su formación dual, tanto en la Universidad como en la empresa?
—Ha sido una combinación muy enriquecedora. La posibilidad de aplicar los conocimientos del máster a los retos reales de mi grupo empresarial ha sido clave, gracias también a la figura del Maestro. A la vez, el hecho de trabajar en distintos sectores me ha permitido ver cómo los mismos conceptos (como la eficiencia operativa, el control de costes o la experiencia del cliente) se pueden adaptar y aplicar de forma diferente según el contexto.
Creo que esta visión 360º es una de las grandes aportaciones de la formación dual. Sin duda, este formato que ofrece IME Business School es muy eficiente ya que te permite centrar tus esfuerzos en alcanzar los objetivos y enfrentarte a los retos propios de la empresa, por lo que no supone un consumo de tiempo extra, si no más bien un ahorro, ya que las problemáticas que se abordan en el máster son los mismos que uno ya debe afrontar en la empresa.
Ha hablado de un Maestro, ¿Qué papel ha jugado su Maestro?
—Ha sido un elemento diferencial. En mi caso, he contado con el apoyo de un director general de otra bodega, con una trayectoria consolidada y una visión externa muy valiosa. Poder contrastar ideas con alguien que entiende el sector, pero que a la vez no está dentro de tu empresa, te aporta perspectiva y te obliga a salir del día a día para reflexionar. Las sesiones con él han sido muy útiles para tomar decisiones mejor fundamentadas y evitar errores comunes. Además, ser su único alumno en toda su trayectoria profesional ha hecho que la relación con mi Maestro sea especialmente cercana. Esa conexión personal es una de esas cosas que te deja el máster para siempre. Al final, además de formarte, el IME te ayuda a cambiar la forma en que ves y haces las cosas, y eso te transforma también como persona y como líder dentro de tu empresa.
Para terminar, un mensaje breve.
—Recomiendo el Executive de IME Business School a cualquier persona que ya esté en puestos de responsabilidad y quiera dar un salto en su forma de dirigir. Es un máster riguroso, bien estructurado y con una orientación muy práctica, que te transforma tanto a nivel profesional como personal. Todo ello, unido a la experiencia de pasar 12 fines de semana en Salamanca, hace que el Executive IME sea una experiencia única.